jueves, 8 de septiembre de 2011

Marìa Elena Duvaechelle, actriz

"Soy una madre castradora en Peleles" 

Por Leonardo Navarro B.

María Elena Duvaechelle es una excelente representante de la nueva tercera edad, esa que permanece activa, que abraza las innovaciones técnicas y aprovecha sus usos, y sobre todo que vive esta etapa como una oportunidad para seguir gozando la vida.

La actriz, de edad inconfesable (pero que reconoce haber entrado hace rato a la tercera edad), reconoce que para su generación todo ha sido demasiado rápido en lo que respecta a la tecnología. Sus pares fueron los últimos que crecieron con la radio, y han vivido todo el cambio que ha significado el paso no solo a la TV, sino también a internet y el mundo digital. Pero su relación con la tecnología la considera fantástica y muy provechosa

“El celular, por ejemplo: hace poco más de 10 años llegó y era al principio tan raro tener ese aparato en las manos ¡y sin cables! Me costó, pero finalmente lo entendí.  Internet fue diferente y prácticamente aprendí sola. Claro que producen un cambio grande, favorable en el caso de mi trabajo, por ejemplo. El celular es muy útil para estar al tanto de las grabaciones, de los ensayos de teatro, de cualquier cambio que se dé2, explica

Reconoce el impacto que la innovación técnica ha tenido en el teatro. Destaca a La Troppa, cuyo teatro define como impactante y está basado prácticamente en lo audiovisual. “En momentos no sabes si son los actores o la proyección lo que estás viendo, y te hace entrar a una dimensión impresionante. No es el teatro que yo hago, pero sí uno que admiro, y está basado totalmente en la tecnología”, señala.

Actualmente está en pantalla en la telenovela nocturna de canal 13, Peleles: “Mi personaje es una madre castradora, que tengo que hacer con mucho humor, porque si no sería terrible, porque las madres de este tipo son fatales. No dejan que sus hijos hagan sus vidas”.

Además, actúa en la obra “Levántate y corre”, de Ictus, que define como pensada para la tercera edad, pues trata de un hombre mayor que no calza con el ritmo de vida actual y hace un viaje retrospectivo para encontrar su espacio en el mundo.

Usted tiene la suerte de permanecer activa ¿Qué diferencia ve con respecto a gente de su edad que no hace nada?
Lo que me queda claro es que si a la tercera edad una persona se queda en su casa, vacía, porque sus hijos se han ido y no los puede ver, por distancia o lo que sea; si esta  persona no tiene un plan o  una actividad, una necesidad de hacer y expresar cosas, está fatalmente  destinado a sentir una soledad espantosa, a sufrir enfermedades y apresurarse a llegar a un tiempo que todos sabemos que tiene que llegar…

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